Exposiciones de gráfica en Barcelona(19)

 Morandi puede ser aburrido. La visión seguida de un conjunto de naturalezas muertas con mínimas variaciones nos hace pensar en la repetición como riesgo. De ese riesgo era consciente el artista, que pensaba que había esquivado con éxito la posibilidad de repetirse en exceso. Pero además Morandi fue profesor de grabado. En este segundo campo la repetición está pautada por una serie de convenciones. La matriz se graba para poder repetir el diseño. La edición es el resultado, la repetición limitada a una serie de ejemplares. 

 En la pedrera tenemos una exposición que nos presenta a Morandi y esa atmósfera de repetición: "Morandi. Resonancia infinita".  Una repetición modesta en la apariencia, nada heroica, que coincide con la imagen que se proyecta del artista, con las anécdotas biográficas que nos cuentan, y con las propias declaraciones que hace sobre si mismo el artista. 

 

Aguafuerte de Giogio Morandi presente en la muestra


Vale la pena, en este sentido de repetición, visitar la exposición de Magritte en el Caixa Forum. En  "La máquina Magritte" no hay grabados, pero también se alude a la idea de repetición. Según el artista, durante un periodo de tiempo de muchos años pintó unos 1000 cuadros, pero en realidad fueron muchos menos, 100. La explicación entre el nº de cuadros pintados la hallamos en los cuadros efectivamente pintados, que si serían 1000, y el nº de ideas que encarnan, que serían 100. Por cada idea hay 10 variaciones, repeticiones del motivo más o menos manifiestas. 

(Un inciso, donde si hay grabados es en otra de las exposiciones del Caixa Forum: "Tattoo. Arte bajo la piel". Aquí hay implícito un tema notable, que es la relación entre la gráfica tradicional artística y el tatuaje, que es grabado sobre piel. En el apartado de tatuaje japonés esta relación es donde se ve con más claridad, al enfrentar fotografiás de hombre tatuados con motivos extraídos de grabados Ukiyo-e, o estéticamente equivalentes, y una serie de grabados, xilografías, de actores tatuados.)

Volviendo a la idea de repetición, podemos dirigirnos a La Maldita Estampa para ver su exposición actual, "Ecos gráficos", de las artistas Silvia Pagliano y Maria Suardi.

La exposición se presenta como un diálogo entre dos grabadoras argentinas, ambas de Rosario.  Pagliano presenta aguatintas y aguafuertes de gran formato, y Suardi pinturas y serigrafías sobre papel, combinadas con efectos gofrados.

 La serie "El Rio" de Pagliano nos remitiría a la estrategia de Magritte, la repetición del motivo en distintas estampas.

 

El Rio 1. Aguainta. 70 x 100 Cms. 

 

El Rio 2. Aguatinta. 70 x 100 cms.

 

En el caso de Suardi, podemos ver en su obra otra perspectiva sobre la repetición, ya que esta se construye repitiendo y variando una forma geométrica simple, el cuadrado, o el cubo en su tridimensionalidad.

 

Mis Rojos. Gofrado y pintura acrílica
 
 
 

Gofrado 1.

Reflexionar sobre la repetición es inevitable en la gráfica. Aparte de la repetición de un motivo o de un recurso formal, se graba para editar, para repetir. Esta intención, y la limitación en la repetición, da lugar a la edición. El original múltiple, ese oxímoron que plantea la gráfica, y que sirve de argumento para limitar el precio, muchas veces nos hace preguntarnos cuanta originalidad única hay en los demás...  Bien mirado todos lo artistas se repiten, idean y formalizan unas pocas obras y sus variaciones, tratando quizá de descubrir el secreto y el límite del Aura, esa promesa de revelación de la que escribió Walter Benjamin.

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